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Aumentan en Salamanca los espacios invisibles dedicados a la prostitución

Aumentan en Salamanca los espacios invisibles dedicados a la prostitución

Los pisos en los que se ejerce la prostitución facilitan el anonimato del cliente y dificultan el control policial.
La mujer que ejerce la prostitución lo hace, en el 90 % de los casos, de manera obligada. La trata de mujeres con fines de explotación sexual existe porque es un negocio muy lucrativo. Así lo piensa Blanca Rubio, coordinadora de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP) , para quien nadie se compromete a solucionar este problema porque no interesa. Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la trata de mujeres mueve al año 3 billones de dólares,  y se reparte en el 95% de  mujeres, el 4% hombres y el 1% transexuales. Actualmente,  España es el tercer destino a nivel mundial que trafica con mujeres.
Desde APRAMP trabajan a diario con mujeres procedentes de otros países y que son explotadas sexualmente, aunque lo hagan por motivos económicos.  Laura Roncero, técnico de la asociación, asegura que el perfil de estas mujeres es el de ser inmigrantes, de países del este y de África-especialmente Nigeria-,  aunque están aumentado las procedentes de Venezuela. Son captadas por mafias con ofertas falsas de empleo porque necesitan enviar dinero a casa  y tienen cargas familiares.“Las amenazan con la policía y las atemorizan para que no denuncien y ni ellas son conscientes de que son víctimas de trata”.
La sensibilización es fundamental, añade, y la campaña “Hola putero” que ha tenido gran repercusión en las redes sociales, es muy positiva porque “tenemos normalizadas costumbres que tienen como objetivo ridiculizar y maltratar a las mujeres”. La trata tiene cara de mujer, pero muchas veces olvidamos que detrás están otros actores como los puteros, los proxenetas, los dueños de los clubes y los traficantes, pero la culpable siempre es la mujer, apunta Blanca.

Pero la trata de mujeres va más allá del ejercicio de la prostitución, porque implica otras realidades que pasan por el maltrato físico, psicológico, violaciones, embarazos no deseados y el abuso de poder.
Desde APRAMP aseguran que los espacios dedicados a la prostitución están cambiando. Además de los típicos clubes de carretera y de las ciudades, cada vez son más los pisos dedicados a ello, como afirma Blanca, y en Salamanca se han incrementando estos “espacios invisibles” porque nadie sabe que en ellos se está ejerciendo la prostitución y dificultan el control de la policía.
Escucha la charla que hemos mantenido en Vivir la Ciudad con Blanca Rubio y Laura Roncero:
 

 

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