Yo me voy al Oeste

Yo me voy al Oeste

Comenzaremos con las presentaciones: Soy Carmen, neonata en ZOES y una incauta cosmonauta de apetito lector insaciable que acaba de estrenar casa en estas calles. Estos estupendos seres acaban de acogerme en su seno y os voy a contar mi flechazo con el Oeste. Porque este barrio enamora. Decidme, ¿cuántos habéis llegado este año al barrio? Seguro que antes incluso de instalaros ya habréis pasado por La Salchichería, atraídos por sus morcillas de crochet, habréis ido corriendo a apuntaros a uno de los talleres de ZOES y habréis abierto la boca sorprendidos con la Galería Urbana que puebla las fachadas de sus edificios.

 

Carmen, nueva vecina del Oeste

Carmen, nueva vecina del Oeste


 

Hace ya un año que aterricé en tierra charra y lo primero que pensé fue: «Yo me voy a vivir al centro; al meollo de todo». Lo que no sabía entonces es que estaba completamente equivocada y que lo bueno se cocía más allá de la Calle Toro y la Calle Zamora. Mochila al hombro y cámara en mano me fui a explorar el territorio. Después de pasar por la oficina de turismo y recorrer concienzudamente cada uno de los lugares de interés turístico, recuerdo que pensé: «Aquí falta algo». Y ese algo estaba más allá de la archiconocida zona amarilla.

 

Mi traslado del centro de la ciudad, al Oeste

Mi traslado del centro de la ciudad, al Oeste


 

El Barrio del Oeste lo tenía todo. Un amigo me dijo: «Han abierto un sitio que se llama La Salchichería y con ese nombre no podemos no ir» y allí que fuimos. Nos lo pasamos genial, y volvimos la semana siguiente y la otra y muchas más. Y es que el Oeste enamora porque, además de jeta y buenas cañas (¡eso que no falte!), en este Barrio se lleva al pie de la letra aquello de que «el ritmo no pare, no». Actividades culturales, eventos gastronómicos, mercadillos y, por supuesto el compromiso social que nutre sus acciones son muchas de las cosas que llamaron mi atención. «¡Yo quiero formar parte de eso!», pensé. Y es que aquí todo fluye y permanece por y para el Barrio. Todo el mundo aporta su grano de arena con una generosidad y solidaridad que, visto el panorama actual, parecía perdida. En fin, ¿qué os voy a contar que no sepáis de lo que ha conseguido construir ZOES? Un año más tarde, aquí estoy. El recibimiento y la bienvenida no podrían haber sido mejores.

Aunque no sé yo si merezco tal título, algunos me han bautizado como la ´Literata del Oeste´(¡no saben lo que dicen!). Me despido por ahora, pero volveré pronto con nuevas secciones llenas de jugo que den salida a las particulares historias de este inquieto sector salmantino.

¿Qué haces tú que todavía no te has venido al Oeste?

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3 Comentarios
  • Maria
    Publicado 17:14h, 03 noviembre Responder

    Elena, al igual que tu tambien soy nueva en el barrio….y por supuesto que me he apuntado a un taller en ZOES…..jajajajja. tambie recibo clases de ingles en la academia DILE…trato perfecto y muy profesionales …..solo me queda empezar a frecuentar La Salchicheria, en cuanto pueda alla que voy. Por lo demas da gusto pasear por este nuestro barrio y disfrutar de la pedazo galeria urbana de la que disponemos, todo un lujo….yo desde luego que estoy encantada con mi muevo barrio!!!!!

    • Elena Martín
      Publicado 17:22h, 03 noviembre Responder

      Hola María.El post lo ha escrito Carmen, LA LITERATA DEL OESTE. Yo solo soy la editora de la web…pero te lo agradezco igual. Seguro que Carmen está encantada de leer tu comentario. Muchas GRACIAS y a seguir disfrutando del Oeste.

  • Maria
    Publicado 17:44h, 03 noviembre Responder

    Cierto Elena, ahora que lo releo me doy cuenta que lo escribio Carmen….si es que voy a la carrera…jajajjaja. Bueno, pues lo dicho….me encanta mi nuevo barrio!!!!!

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